El fallecimiento de Pinochet es sin duda una noticia muy triste...
No triste por que él haya fallecido, sino que por lo que su muerte provoca.
Toda esa gente celebrando en las calles... en realidad es la alegría más triste que he visto. Detrás de cada uno de ellos hay una historia de torturas, maltratos, vejámenes inimaginables. Es comprensible que la muerte de Pinochet sea parte de su consuelo, que se abran las champañas para expresar su felicidad...
Los Pinochetistas, por otra parte, sacando lo peor de ellos, atacando a todo el mundo, faltandole el respeto a las personas, pensando que su "general", "padre" e incluso "dios" estuvo en todo lo correcto al matar a miles y miles de chilenos. "Lástima que quedaron comunistas vivos"... Eso si que es ocio. ¿Como se atreven a decir lo que dicen y mostrar la cara? Dios, de verdad, apiádate de esa gente.
Personalmente me da rabia. Me da rabia que no me de pena. Me carga la gente que me hace sentir cosas que no me gustan, y Pinochet fue uno de ellos. Gracias a Dios no tuve desgracias familiares ni personales que lamentar, pero no puedo hacer menos que solidarizar con los que no tuvieron esa suerte, y tuvieron que sufrir lo indecible.
Por eso la muerte de Pinochet no me da pena. Creo que hasta es bueno, y me carga pensar así de la muerte de alguien...
11 de diciembre de 2006
¡Que rabia-pena!
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2 Comments:
Resumiste todo lo que pensaba y siento de la muerte de pinochet.. :D
Suscribo lo anterior. Aunque en cierta forma si me da pena. Pena de que no sufriera en sus carnes todo lo que él hizo sufrir. Ojalá se pudra en su propio infierno, que si existe, seguro que es una dosis eterna de su propia medicina.
Un saludo!
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